jueves, 21 de marzo de 2013

DECLARACIÓN DEL P. GENERAL DE LA COMPAÑÍA DE JESÚS

En nombre de la Compañía de Jesús doy gracias a Dios por la elección del nuevo Papa, Cardenal Jorge Mario Bergoglio S.J., que abre para la Iglesia una etapa llena de esperanza. Todos los jesuitas acompañamos con la oración a este hermano nuestro y le agradecemos su generosidad para aceptar la responsabilidad de guiar la Iglesia en un momento crucial. El nombre de "Francisco" con que desde ahora le conocemos, nos evoca su espíritu evangélico de cercanía a los pobres, su identificación con el pueblo sencillo y su compromiso con la renovación de la Iglesia. Desde el primer momento en que se ha presentado ante pueblo de Dios ha dado testimonio de modo visible de su sencillez, su humildad, su experiencia pastoral y su profundidad espiritual. "Es rasgo distintivo de nuestra Compañía ser un grupo de compañeros (...) unido con el Romano Pontífice con un vínculo especial de amor y servicio" (NC 2, n. 2). Por ello, compartimos la alegría de toda la Iglesia al tiempo que deseamos renovar nuestra disponibilidad para ser enviados a la viña del Señor, conforme al espíritu de nuestro voto especial de obediencia, que tan particularmente nos une con el Santo Padre (CG 35, D.1, 17). P. Adolfo Nicolás S.J. Superior General

jueves, 14 de marzo de 2013

Comunicado del Provincial de España de la Compañía de Jesús

La Compañía de Jesús en España, y en su nombre el Provincial de España, P. Francisco José Ruiz Pérez SJ, se congratula y acoge con fidelidad y con esperanza el nombramiento del nuevo Pontífice de la Iglesia católica, Francisco I. Revivimos en un momento tan trascendente para la Iglesia como éste, lo que articula nuestro carisma fundacional: “Nuestro servicio a la Iglesia sólo será verdaderamente cristiano si está anclado en la fidelidad a Aquel que hace nuevas todas las cosas; y sólo será jesuítico si está unido con el sucesor de Pedro” (Normas Complementarias, 252 & 1). Los jesuitas oramos por este compañero nuestro, el ahora nuevo Papa Francisco I, que realizó parte de su formación jesuítica en Alcalá de Henares (1970-1971), y por la tarea que tiene ante sí para toda la Iglesia. Estamos convencidos de que el Espíritu lo alentará para continuar, con sencillez y audacia, la tarea de la nueva evangelización que iniciaran Juan Pablo II y Benedicto XVI. De esa nueva evangelización está necesitado nuestro mundo para salir de sus muchas encrucijadas de presente y futuro.